"Compañeros de viaje"
Años atrás, entre las noticias que se comentaban al final de las vacaciones veraniegas acostumbraba a aparecer la referente al numero de separaciones y divorcios, fruto de la la convivencia en común durante el viaje y estancia, en principio lúdica, fuera del entorno familiar habitual, en la que salía a relucir todo lo poco en común que permanecía entre la pareja.
La situación económica ha llevado a que compañeros de viaje que no se aguantaban lleguen a acuerdos de convivencia, por ser mas beneficioso para ambos mantener la misma que llevar a cabo una separación. Aún así, hay compañeros de viaje que tienen que sobreponerse a distintas crisis durante el mismo.
En los últimos años, acostumbro a viajar con Roncano, es dura, de apariencia pelirroja con toques grises y sus problemas de movilidad los soluciona gracias a cuatro ruedas. Cierto es que lo normal es que nos separemos durante el viaje, sobre todo cuando se emplea el avión como medio de trasporte, pero al final siempre la espero y acaba apareciendo en la cinta negra de la llegada. La aprecias mas por lo que tiene dentro que por su aspecto externo, al que tratas para que sea distinto a otras.
Pero nuestra relación siempre se ha visto afectada por otras compañías, casi siempre aéreas, que la incitan a que no aparezca al final del trayecto y a veces incluso en el lugar intermedio que se había acordado al planificar el viaje. Así uno se encuentra en este momento, sin compañera de viaje y esperando que alguien envíe un SMS informando donde esta, si es que han atendido al reclamo.
A nuestros compañeros de viaje los queremos por su potencial interior y no por apariencia externa, que a otras compañías puede atraer.
En el aeropuerto de Lisboa, 28 de septiembre de 2011